jueves, 15 de septiembre de 2016

Antonio Palacios: "La literatura a poco que le entregas algo te ofrece mucho"

- ¿Cuál es su primer encuentro importante con la lectura que recuerda?

- Pues si no recuerdo mal, el primer libro que por mi cuenta adquirí fue "Hamlet" de Shakespeare. No recuerdo bien el motivo de por qué esa obra y no otra. Pero recuerdo que lo leí varias veces, al igual que otras obras del mismo autor. A partir de "Hamlet" fue cuando inicié la adquisición de libros. La lectura era por aquel entonces para mí toda una forma de descubrir el mundo, explorarlo, descubrirlo. Aunque también supongo que una forma de encontrar un sitio. Pero las lecturas que más me impactaron las encontré en casa. Fueron obras de Nietzsche, como "Más allá del bien y del mal" o "Así habló Zaratustra". Fueron sin ninguna duda obras que abrieron en mí importantes interrogantes. Muchas preguntas en una edad en la que creo que son más importantes las mismas preguntas que las respuestas. En cierta manera, creo que Nietzsche me abrió de golpe muchos horizontes distintos. Algunos de ellos conducen a la filosofía, pero también otros llevan a los clásicos, a la literatura o el arte, a la ciencia. Y además era un autor sumamente atractivo, porque ofrecía cierto tipo de respuestas que de otra manera no encontraba en ninguna parte.

- ¿​Y el último, el más reciente?​

- De los libros más recientes que he podido leer, destaco el libro de poemas "El nombre de los hombres", de un autor jiennense llamado Juan Cruz López y publicado por Baile del Sol. Me parece un libro con un aspecto muy trabajado, un lenguaje y estilo muy sencillo pero elaborado e impecable. Por encima de todo, me parece un enorme ejercicio y esfuerzo de búsqueda, a la vez que de apertura de múltiples interrogantes. Por otra parte, creo que merece la pena destacar que todo el texto respira mucha honestidad y autenticidad. Desde mi punto de vista, el autor trata de evitar lugares o fórmulas comunes y francamente creo que lo consigue. Es uno de esos libros que hace reflexionar y sentir, desde los hechos más nimios y la experiencia, hasta cuestiones transcendentes. Pienso que es toda una obra de madurez literaria. Recomiendo su lectura.

- ​Hablaba de Nietzsche, de filosofía. En ese camino entre la ciencia y la literatura, ¿más cerca de qué la colocaría?

- En mi opinión, me gusta imaginar a la filosofía a medio camino entre la literatura y la ciencia. La filosofía siempre ha mantenido cierta tensión entre lo científico y lo artístico. Aunque, en su caso, lo científico no se puede asemejar a lo científico en las ciencias exactas o naturales por razones de su objeto. La filosofía creo que contiene cierto equilibrio entre la sistematicidad o sistémico de las ciencias y el carácter creativo de indagación personal o innovación de las artes o la literatura. En cierto modo, no podría ser de otra manera. Sobre todo porque las disciplinas cambian de temáticas o enfoques, contagiadas por otras disciplinas o sencillamente influenciadas por su contexto. Y la filosofía es indagación personal, pero también una mirada a la exterioridad. Pienso en grandes autores que se han ocupado de grandes temas desde el Siglo XX, como son el poder, el deseo o el lenguaje y un gran número de ellos se han ocupado también de lo artístico o literario. En todo caso, su carácter social, aunque en cada una funcione de una manera distinta, creo que es un aspecto que une a la ciencia, la literatura y la filosofía.

- ¿​Se podría decir que la filosofía se ocupa de plantear las preguntas mientras la ciencia halla las respuestas?

- No pienso que la filosofía tan sólo se ocupe de formular preguntas y la ciencia respuestas. Pienso que la cuestión es mucho más compleja. Ya que eso reduciría a la filosofía a cierta teoría de la ciencia o del conocimiento. Y personalmente veo a la filosofía como algo práctico. Imagino que existen asuntos que de forma más idónea se ajustan a la ciencia, mientras otros son más idóneos para la filosofía. El conocimiento es una herramienta. De alguna forma, pienso que tanto la ciencia o la filosofía son formas de abordar problemas o buscar soluciones a cuestiones. En ocasiones, ambas se encuentran, se cruzan o se distancian en sus formas de abordar las cuestiones. Por otra parte, muchas sociedades a lo largo de la historia han vivido de múltiples formas sin la ciencia ni la filosofía, incluso sin la escritura. E imagino que tenían muchas preguntas y respuestas para explicarse a ellos mismos, el sentido de la vida o el funcionamiento de su entorno. En definitiva, pienso que son dos formas de conocimiento, que como formas delimitan su contenido, pero que mantienen una estrecha interrelación.

- ¿​Qué cuestión filosófica le interesa más y por qué?

- Más que cuestiones filosóficas, me despiertan mucha curiosidad temas que guardan múltiples cuestiones. Por ejemplo, el neoliberalismo es algo que contiene muchas cuestiones: el poder, el deseo, la subjetividad, el orden... Siempre me ha llamado la atención. Ya que no es solamente una forma económica, sino un tipo de sociedad, de gobierno, de cultura, se podría decir que es toda una forma de vida. Supongo que despierta mi interés porque es una forma de dar sentido y producir tanto el mundo en el cual vivimos, así como toda una forma de producción y regulación de las subjetividades y las relaciones sociales o personales, que son formas de sentir, pensar y actuar. Por lo que es una manera de poder abordar tanto lo social como lo individual, desde puntos de vista distintos como lo político, lo económico, lo cultural...En cierta manera, todo eso no deja de estar conectado con las preguntas de siempre: ¿qué somos?, ¿de dónde venimos?, ¿hacia dónde vamos?

- ¿Y qué lugar ocupa la literatura en todo esto?​

- Pues imagino que la literatura es otro lenguaje más de la cultura. Un lenguaje que se graba en el cuerpo, en cierta manera indeleble. Y que desde mi punto de vista, trata de narrar, fabular, ficcionar y crear universos llenos de sentido en sí mismos, aunque conectados de múltiples maneras siempre a la realidad. Ya que la literatura, desde mi perspectiva, viene a funcionar como los sueños. Es decir, no son representaciones a modo de fotografías fijas de la realidad, ni tampoco pura fantasía. Por otra parte, la literatura queda totalmente al margen de esa tendencia de otras disciplinas a intentar aprehender o representar el "todo", y pienso que eso la hace mucho más libre. La literatura comunica, transcribe, crea, produce, pero hallando siempre su sentido en el lector o espectador. En definitiva, pienso que es un lenguaje con un enorme potencial y una gran riqueza.

- ¿​Por qué hay una desconfianza de la filosofía clásica en el rol público de los escritores o los poetas? ¿Tan peligrosos eran para Platón, por ejemplo, que los expulsa de su república?

- Imagino que debido al racionalismo griego. El fin de la filosofía se convierte en un conocer una verdad accesible. Por lo que la poesía o el papel del mito, en el caso de Homero o Hesíodo, no pueden constituir ese camino a la verdad, puesto que hablan de apariencias, de cosas cambiantes, de relaciones entre dioses, héroes, humanos. El orden cosmogónico y la sociedad griega van cambiando. Y en ese aspecto, se opondrán historiografía y mito, así como filosofía y poesía. La filosofía de Platón está profundamente influenciada por el camino socrático de que lo bueno es la virtud, la virtud es lo bueno y el conocimiento el camino. Es decir, es profundamente moral. Por tanto, la poesía como la retórica son vistas con recelo para la educación, ya que ambas alejan del camino de la verdad platónica y de su estado ideal de cosas. Aunque paradójicamente Platón y autores posteriores estén poblados de mitos.

- ​¿Para qué sirve hoy la filosofía?​

- La filosofía tiene múltiples funciones. Por encima de todas, creo que procura dar sentido a la realidad. Ya sea de forma personal o social. Procediendo en búsqueda de respuestas que van desde lo más inmanente a lo más trascendente. Sobre qué somos, nuestro pasado y esbozando posibilidades de lo que podemos ser, tanto como individuos como sociedades. Pienso que vivimos en una época profundamente especializada de conocimiento. Y esa especialización nos hace perder miradas panorámicas, de conjunto. La pluralidad y diversidad de la materia creo que es punto fuerte. Y en lo concreto, pienso que es muy valiosa para la reflexión, para la generación de empatía, el diálogo o la búsqueda de soluciones.

- ¿​Y la literatura?​

- La literatura me parece que vendría a ser como aquella frase de Píndaro: "Llega a ser lo que eres". Es un camino de creación de mundos posibles. Un camino que hace que dejes de ser tú, para pasar a ser otro nuevo tú. Implica un proceso de transformación y reinvención, desde la escritura y desde la lectura. Y en ese "Llega a ser lo que eres", se producen encuentros y desencuentros con el otro. En cierta manera, la literatura es creadora o potenciadora de creación de modos de vida, puntos de vista o perspectivas. Supongo que la creación literaria es muy amplia y puede ser muy heterogénea. Pero en ese camino que traza de mundos posibles, somos capaces de crear posibilidades que de otro modo no. Supongo que a eso se refería Paul Valéry, al decir que el arte siempre va por delante de la ciencia. Por otra parte, ya desde la tradición oral, la literatura es como un punto de encuentro constante y muy fuerte.

- ¿​Cuál es su relación con la creación literaria?​

- Considero mi relación con la creación literaria una relación fluida, productiva y muy recíproca. Ya que a la literatura a poco que le entregas algo te ofrece mucho. A pesar de requerir mucho esfuerzo y trabajo, es una actividad muy gratificante. Hace un par de meses, la editorial Ediciones en Huida publicó mi primer libro de poemas no autopublicado: "Hybris: diario de un poeta desconocido". En cierta manera, la creación literaria para mí ha cambiado mucho desde que comenzase a escribir. Puesto que requiere cada vez de un trabajo y un nivel de exigencia mayores, en busca de mejorar tanto el proceso creativo como la obra final. Por lo que la cantidad de tiempo y esfuerzo dedicados a la creación literaria aumenta. Ya no se trata tanto de un tiempo marginal como en los inicios, sino de un trabajo mucho más constante.

- Háblenos un poco de cómo se enfrenta al proceso creativo.

- El proceso creativo trato de abordarlo de múltiples formas. Siempre me planteo modificar el proceso de realización de cada obra, pensando que al variar el proceso el resultado será distinto. Por otra parte, el mismo hecho de variar el proceso me ayuda a aprender y tratar de mejorar. Aunque existen aspectos que ayudan en todo proceso, como tomar muchas notas tanto de lecturas como para la escritura, repasar mucho lo que escribo, dedicar mucho tiempo a reflexionar antes de redactar qué quiero hacer y cómo hacerlo...Y sobre todo, trato de mantener cierto hábito y constancia. Al final, todo proceso creativo supongo que trata de encontrar una técnica idónea que facilite la creación.

- ¿​Qué podemos encontrar en tu libro "Hybris: diario de un poeta desconocido"?​

- Se trata de una obra dividida en siete actos, que recoge una selección de poemas de los últimos años. Se encuentran temáticas recurrentes en mi obra: el tiempo, la literatura, la juventud, las relaciones...Mi idea con esta obra era presentar una selección de poemas sobre diversas temáticas recurrentes en mí. Vistas las temáticas desde distintas perspectivas. La intención era que formasen cierta línea argumental no lineal. Una línea argumental en la que los poemas de los distintos actos estuviesen conectados, formando un mapa existencial-literario propio que el lector pudiera ir desplegando a su antojo, desde la diversidad y unidad de la obra.

- ¿Cómo pueden quienes lo lean contactar con usted?​

- Pueden contactar en mi cuenta de twitter: @FloresdlParnaso También pueden seguir ahí las actualizaciones de las entradas de mi blog: floresdelparnaso.blogspot.com​

(Nicolás Salas Ramos)

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